Crujientes y cremosas. Así son éstas deliciosas croquetas, una explosión de texturas y sabores que deleitarán tu paladar. Están inspiradas en los palitos de mozzarella, lo que supone un éxito asegurado entre los más pequeños de la casa y una manera magnífica para que degusten y coman verdura sin que le pongan ningún "pero".
El "pero" se lo pongo yo siempre a la hora de "liarlas", no hay nada que me de más pereza, pero el trabajo bien merece la pena, os lo puedo asegurar.
INGREDIENTES:
- 1 cebolla.
- 2 berenjenas sin piel.
- 2 dientes de ajo.
- 50 grs. jamon de taquitos de jamón serrano.
- 100 grs. queso mozzarella.
- Aceite de Oliva Virgen Extra.
- 1 cucharada de mantequilla.
- 1 cucharada de harina.
- Leche.
- Sal, pimienta negra molida y nuez moscada.
- PARA EMPANAR:
- Harina.
- Huevo batido.
- Pan rallado.
ELABORACIÓN:
- En un buen chorreón de AOVE junto con la cucharada de mantequilla, pochamos la cebolla y una vez lista, añadiremos la berenjena y cocinaremos hasta que esté bien hecha (en éste caso la berenjena la añadí posteriormente, ya que tenía un sobrante de otra receta). Añadimos entonces el jamón y le damos unas vueltas.
- Añadimos entonces la cucharada de harina y la tostamos para seguidamente ir añadiéndole la leche previamente calentada (no pongo medidas porque va al gusto del consumidor, dependiendo si os gusta la bechamel más o menos espesa). Calculo que en mi caso habrán sido unos 350-400 ml. Añadimos la sal, la pimienta y la nuez moscada y vamos batiendo con unas varillas hasta que adquiera la consistencia deseada.
- Una vez hecha la bechamel, añadimos el queso mozzarela y removemos para integrarlo bien con el resto de ingredientes. Tapamos bien con un film pegado a la masa para evitar que se forme costra y dejamos enfriar unas horas dentro del frigorífico.
- Una vez fria la masa, empezamos a darles forma a las croquetas y rebozamos cada una por harina primero, huevo batido y pan rallado.
- Freimos en abundante aceite caliente.